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En la madrugada del miércoles 2 de agosto, una bola de fuego atravesó los cielos del sureste de los Estados Unidos. Y gracias a los observadores de la superluna de esa noche en el área, el evento fue capturado en video.
La Sociedad Americana de Meteoros recibió 74 informes de una bola de fuego en la noche de la luna llena de esturión. Los mismos provinieron de nueve estados: Georgia, Illinois, Indiana, Kentucky, Ohio, Tennessee, Virginia, Virginia Occidental y Carolina del Norte. De acuerdo a los datos recolectados, este visitante nocturno voló por el cielo con dirección sureste.
Algunos reportes también indicaron que el bólido creó explosiones sónicas que fueron lo suficientemente fuertes como para hacer temblar los edificios y despertar a más de una persona.
En las imágenes bajo estas líneas, puede verse como el particular fenómeno fue captado por el astrónomo aficionado Bill Stewart en Virginia Occidental.
«Nunca había visto algo así. El destello inicial fue luminoso, más brillante que la luz de la calle en el patio en el que estaba parado», escribió un observador llamado Dustin L. «Es por eso que miré hacia arriba y lo vi. El estruendo momentos después fue lo suficientemente fuerte como para asustarme».
«El brillo de la luz fue tan grande que dominó el de la luna llena en el este», añadió otro testigo llamado Jack W.
Inicialmente se especuló que la bola de fuego probablemente fue causada por la lluvia de meteoros de las Perseidas o una de las otras dos lluvias actualmente activas. Sin embargo, su camino no se alineó con el radiante de ninguna de esas lluvias —o el punto en el cielo desde el que se origina una lluvia de meteoros—.
Según el experto Bill Cooke de la Oficina del Entorno de Meteoroides (MEO) de la NASA, probablemente se trató del fragmento de un cometa. Estimó que lo que provocó el inesperado espectáculo en las primeras horas del 2 de agosto tenía alrededor de 30 centímetros de diámetro con un peso cercano a 34 kilogramos.
«Entró en la atmósfera de la Tierra a unos 80 kilómetros sobre la ciudad de Krypton en Kentucky, moviéndose aproximadamente hacia el sureste a 60.000 kilómetros por hora», precisó el experto a Spaceweather.com. «El objeto viajó poco más de 100 kilómetros a través de la atmósfera antes de desintegrarse a 48 kilómetros sobre Duffield, Virginia».
Cooke agregó que, según los datos acústicos registrados por la Universidad de Ontario Occidental, la bola de fuego produjo una explosión equivalente a alrededor de 2 toneladas de TNT y en su punto máximo fue 5 veces más brillante que la luna llena.
Se desconoce la identidad del cometa responsable del fragmento.
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