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Un hallazgo extraordinario en una cueva de China ha revelado los restos de un gato prehistórico tan pequeño que podría caber en la palma de una mano.
Prionailurus kurteni es comparable en tamaño con los gatos más pequeños que viven en la actualidad, como el gato herrumbroso (foto). Crédito: BBC.
La especie recién descubierta, bautizada como Prionailurus kurteni, es considerada la más diminuta jamás registrada, según un estudio publicado en la revista Annales Zoologici Fennici.
El fósil, compuesto por un fragmento de mandíbula con dos dientes, fue encontrado en la cueva de Hualongdong, un yacimiento arqueológico de gran importancia. Los investigadores estiman que el felino, que pertenecía al género de los gatos leopardo (Prionailurus), medía entre 35 y 50 centímetros de largo y pesaba aproximadamente un kilogramo, similar a las especies de gatos salvajes más pequeñas de la actualidad, como el gato patinegro (Felis nigripes) y el gato herrumbroso (Prionailurus rubiginosus).
La cueva de Hualongdong, habitada por humanos primitivos, ofreció un entorno protegido que permitió conservar los restos del pequeño felino. De acuerdo a los científicos chinos, este micifuz podría haber entrado a la cueva en busca de roedores que se alimentaban de los restos de comida de los antiguos habitantes.
«Este gato es claramente más pequeño que uno doméstico y comparable en tamaño al gato salvaje más pequeño de la actualidad, con un peso aproximado de 1 kilogramo», explicó el Dr. Qigao Jiangzuo, autor principal del estudio y miembro de la Academia China de Ciencias.
Diferentes vistas de la mandíbula fosilizada perteneciente a un diminuto gato leopardo, encontrada en la misma cueva de Hualongdong, en la provincia de Anhui, al este de China, que fue hogar de una familia de humanos antiguos. Crédito: Academia China de Ciencias.
Además de su reducido tamaño, la inclinación característica de uno de sus dientes conecta a esta especie con el ancestro común de los gatos domésticos y el gato de Pallas (Otocolobus manul), aportando evidencia fósil clave sobre la evolución de la familia felina.
Los restos fósiles de gatos leopardo ancestrales son extremadamente raros debido a que estos animales habitaban bosques sin refugio, donde sus huesos se descomponían rápidamente.
En este contexto, el actual descubrimiento no solo enriquece el conocimiento sobre la diversidad pasada del género Prionailurus —que hoy cuenta con cinco especies distribuidas en los bosques del sur y sureste de Asia—, sino que también subraya el papel clave de los ecosistemas protegidos, como las cuevas, en la conservación del registro fósil.
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