La Casa Blanca aseguró que todavía "no hay evidencias" de que exista vida fuera de nuestro planeta, ni de que una "presencia extraterrestre" haya contactado con "algún miembro de la raza humana", según publicó en su sitio web.

EE.UU. es uno de los países más reacios a liberar este tipo de información al público, algo que seguramente es proporcional al nivel de la maquinaria de encubrimiento que posee.

En dos iniciativas distintas, un grupo de 17.000 ciudadanos han mostrado su inquietud por el conocimiento del Gobierno sobre la vida más allá de la Tierra y le han pedido que haga público "inmediatamente" qué sabe sobre la existencia y las comunicaciones con seres extraterrestres. En un intento por acercarse a sus ciudadanos, el Gobierno del presidente estadounidense, Barack Obama, lanzó en septiembre la página web "We the people", en la que anima a expresar inquietudes, peticiones y preguntas y donde se han colgado la dos solicitudes de información sobre la vida extraterrestre.

Los firmantes piden que se abran al público "todos los archivos de todas las agencias y documentos militares relacionados con este fenómeno" y que se trate el asunto en audiencias públicas en el Congreso con "aquellos cuyas voces han sido silenciadas por juramentos de secreto inconstitucionales".

La respuesta por parte del "gobierno" no sorprende a nadie, en un tiempo donde la fe del pueblo estadounidense en sus gobernantes ha decaído justificadamente a niveles muy bajos, es claro que no iban a dar por sentado el encubrimiento de archivos OVNI que llevan realizando desde hace muchas décadas, ni desclasificar documentos como otras naciones del mundo han hecho recientemente. Después de todo, el admitir que tienen evidencias de presencia alienígena en nuestro planeta y fuera de éste, recolectadas por agencias militares y espaciales a través de varios años; el admitir que han silenciando testigos con amenazas; el admitir que han asesinando a científicos e investigadores curiosos; el admitir que trabajan con tecnología alienígena intentando replicarla; y admitir que han elaborando una intrincada maquinaria de encubrimiento con protocolos a seguir para con el público y la prensa, sería otro golpe en la credibilidad institucional del país.

El encargado de llevar al público el speech que nos recuerda a aquellas trilladas frases de los Hombres de Negro en la película intitulada con el mismo nombre en honor a éstos, es Phil Larson, asesor de la división de política espacial y comunicaciones de la Oficina de Política de Ciencia y Tecnología de la Casa Blanca.

"El Gobierno de Estados Unidos no tiene evidencia de que exista vida fuera de nuestro planeta o de que una presencia extraterrestre haya contactado con un miembro de la raza humana", asegura Larson.

Por ello, agrega, "no hay información creíble que sugiera que se haya ocultado a ojos del público cualquier evidencia".

Larson aclara que eso no significa que el asunto de la vida fuera de nuestro planeta no sea un tema discutido o explorado. De hecho, hay numerosos proyectos en los que se está trabajando para entender si puede existir vida fuera de la Tierra.

Luego, en un intento por alejar el tema lo más posible de nuestro planeta, cita ejemplos de exploración espacial, como la misión del telescopio Kepler de la NASA, cuyo objetivo es detectar desde el espacio planetas con condiciones similares a la Tierra en los que podría darse potencialmente vida o la próxima misión a Marte "Mars Science Laboratory".

Un acto de soberbia, cinismo y arrogancia que evade por lejos las demandas presentadas por miles de ciudadanos para la desclasificación de documentos OVNI sobre casos sucedidos AQUÍ, en nuestro planeta y en las cercanías (como aquellos protagonizados por astronautas), y no fuera de éste. Lo que, por lógica implica que estaríamos siendo visitados por civilizaciones del Cosmos que lograron llegar a nuestro vecindario galáctico antes que nosotros al de ellos.

Para escarnio de la Casa Blanca, SÍ existe amplia evidencia, desde el remoto pasado de la humanidad, del contacto con seres de otros mundos, como así también evidencia testimonial y física de casos del último siglo que prueban indefectiblemente que no estamos solos en el Universo y que por lógica existen civilizaciones mucho más avanzadas que la nuestra cuyos planes de exploración espacial... desconocemos.

Antes la información al público estaba muy sesgada, y éste fácilmente caía en los ardides y mentiras que los "guardianes" del poder de turno propinaban a través del dominio sobre los medios de comunicación y el establishment científico. Hoy en día, en la Era de las Comunicaciones, el público ha comenzado a perder los miedos de contar y registrar sus experiencias con el fenómeno OVNI, los científicos comienzan a ceder terreno y abolir viejos paradigmas, y mucha información filtrada extra-oficialmente se ha puesto aquí en la red de redes, a disposición de todos.

Ya solo es cuestión de cuándo... Y habría que preguntarse si la Casa Blanca declara mentiras de igual color... o si esconde algo más oscuro.