¿El caso perfecto de mutilación de ganado? Peones avistan extrañas criaturas en el lugar de los hechos

Los campos cercanos al Río Colorado, en Argentina, vienen siendo un punto caliente del misterio de los animales mutilados, ya que en el 2002, en pleno auge de estos sucesos, rompieron el molde con varios casos insólitos. Uno de ellos sucedió en la localidad de La Adela, provincia de La Pampa, con un caso que presenta más de 40 animales muertos y mutilados en un solo campo. Ahora, otro extraño incidente ha vuelto a suscitar el interés de los investigadores.

Imagen ilustrativa.

En esta oportunidad, el hecho se concentra cerca de un campo de la Ruta 154, a pocos más de 35 km. de Río Colorado, puerta de la Patagonia, y a 35 km de La Adela, La Pampa, informa el portal de investigación Visión Ovni.

Hace unos 20 días (alrededor del 9 de agosto), durante la noche, los peones del establecimiento observaron una serie de luces en una zona del campo. Pensando que se trataban de cuatreros, salieron con sus armas hasta el lugar y tratar de pescar in fraganti a los merodeadores. Cuando llegaron al lugar, no encontraron las luces, sino una cantidad de animales muertos y mutilados, con perfectos cortes en sus quijadas y partes traseras. Esta no era la primera vez, ellos ya habían observado casos similares en la oleada de mutilaciones en 2002.

Cuando pensaban que terminaban los hechos extraños, los peones —según indican las fuentes— se encontraron de cara con dos seres, uno pequeño y el otro más alto. Del susto, ambos accionaron sus rifles sin saber si alguno de los disparos impactó en alguno de estos seres.

«Dicen los chicos, vieron una criatura pequeña y luego una grande y tiraron tiros. No quieren hablar mucho hasta que se sepa de que se trató», comenta uno de los empleados del campo.

Ubicación de la localidad de La Adela, La Pampa, Argentina.

Los testigos, describen que estos dos seres «tenían escamas en sus espaldas y sus caras eran de color grisáceas y muy feas».

A la mañana del día siguiente, otro de los empleados salió de recorrida por el campo para ver con mayor detalle el lugar de los hechos y se encontró al pequeño ser como a las 9 a.m., y despavorido se fue del campo al pueblo, sin querer regresar al sitio del encuentro cercano. Hasta pidió que le vayan a buscar las cosas porque no quería volver por nada del mundo a ese lugar.

Como consecuencia de los hechos acaecidos, el productor dueño del campo —del cual se resguarda su identidad—, ha decidido colocar cámaras de seguridad en todo el cuadro del campo y el casco de la estancia, para poder obtener evidencia de quién o qué está provocando estas muertes.

El SENASA, el organismo argentino responsable de garantizar y certificar la sanidad y calidad de la producción agropecuaria, está participando de la investigación junto a la policía, que mantienen un fuerte hermetismo sobre el suceso. Sin embargo trascendió que encontraron huellas que levantaron los investigadores para peritar. Que los rastros se encontraron cada 10 metros, como que esta criatura pegaba saltos en esta distancia.

La investigación está en curso...