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«Esto no era un avión. No era un satélite, un dron ni nada parecido. No había forma de confundir lo que era: todos vimos una enorme nave en forma de disco flotando a unos pocos cientos de pies del suelo con tres filas de ventanas y luces».
Cuando Michael Lehmann informó sobre su encuentro con un ovni en el icónico Anfiteatro Red Rocks de Colorado al Centro Nacional de Reportes de OVNIs (NUFORC), no sabía que se volvería viral unas semanas después. Pero una vez que la noticia se difundió, el relato del avistamiento fue rápidamente recogido por numerosos medios de comunicación de todo el país.
En resumen, Lehmann y una docena de compañeros de trabajo estaban en el anfiteatro en las primeras horas de la mañana del 5 de junio, después de un evento encabezado por la banda All Time Low, cuando avistaron un enorme objeto desconocido, estimado en varios cientos de pies de largo, en el cielo nocturno. Después de estar presente durante unos 30 segundos, el ovni, descrito como metálico y con tres niveles de ventanas, pareció desvanecerse en el aire.
Antes de profundizar, vale la pena señalar que Lehmann se describió a sí mismo como un «escéptico esperanzado» en cuanto a los ovnis, alguien que siempre quiso «creer» pero lo encontraba difícil sin pruebas personales.
Según el reporte subido a NUFORC por el testigo principal, así sucedió el hecho:
«Anoche estaba trabajando en el Anfiteatro Red Rocks cuando uno de nuestros compañeros de trabajo de repente nos dijo: “Oigan, ¿qué es eso allá? Parece una nave espacial”. Todos giramos para mirar en la dirección que señalaba y, efectivamente, había un ovni flotando a aproximadamente media milla o una milla al norte de Red Rocks. Una docena de nosotros lo vimos. Todos seguíamos preguntándonos: “¿También lo estás viendo?”. La respuesta fue un rotundo “sí” de todos en el grupo.
»Lo que vimos fue una nave metálica clásica en forma de disco que medía varios cientos de yardas de largo. Tenía tres niveles de ventanas, casi como un edificio de oficinas de tres pisos muy largo. Esta cosa era totalmente silenciosa. No hacía ningún sonido. Lo que es aún más sorprendente es que en cuanto todos comenzamos a notarla y dejamos de hacer lo que estábamos haciendo para prestarle atención, la nave se inclinó en ángulo y lentamente comenzó a moverse con su “panza” hacia el frente en dirección este. Luego comenzó a desvanecerse hasta volverse invisible. No se disparó en la distancia. Simplemente se disolvió en el éter. Todos la vimos desvanecerse.
»Esto no era un avión. No era un satélite, un dron ni nada parecido. No había forma de confundir lo que era: todos vimos una enorme nave en forma de disco flotando a unos pocos cientos de pies del suelo con tres filas de ventanas y luces. Luego todos la vimos desvanecerse en la nada tan pronto como supo que estaba siendo observada.
»Había una docena de otras personas que lo vieron conmigo».
Según Lehmann, muchos internautas que se hicieron eco del caso le han preguntado por qué nadie del grupo tomó una foto. Su respuesta fue simple: todos estaban ocupados trabajando y para cuando los testigos comenzaron a comprender lo que estaban viendo, la nave ya había desaparecido.
Desde el avistamiento, los compañeros de trabajo han continuado discutiendo el difícil de creer encuentro, llegando a la conclusión de que, efectivamente, vieron algo extraño en el cielo nocturno.
Lehmann señaló que no estaba seguro de si el extraño objeto en el cielo era militar, extraterrestre o de otra naturaleza, pero está seguro de que vio algo. También espera que al hablar públicamente sobre el encuentro, ayude a romper el estigma en torno a los informes de avistamientos extraños en el cielo. Además, mencionó que desde que hizo pública su historia, un gran número de amigos han compartido sus propios relatos similares.
Fuente: Denver Gazette. Edición: MP.
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1 comentario
19:52
QUE CASUALIDAD QUE NUNCA HAY UN VIDEO PARA CORROBORAR
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