Mystery Planet es un sitio web que ofrece noticias y artículos sobre ciencia y misterios. Para estar al tanto de todo lo que publicamos, además de seguirnos en nuestras redes sociales o suscríbete a nuestro boletín de noticias, te invitamos a nuestro canal de Telegram.
Un brillante meteoro diurno, proveniente de la misma corriente de escombros cósmicos que habría causado el famoso evento de Tunguska y que se asocia a la hipótesis del impacto del Dryas Reciente —la corriente de meteoros de las Táuridas—, iluminó los cielos del sureste de Estados Unidos antes de, aparentemente, perforar el techo de una vivienda en Georgia.
El espectacular fenómeno ocurrió el viernes 27 de junio a las 12:25 p. m. (hora local), cuando un objeto de gran tamaño —mucho mayor que el típico meteoro del tamaño de un guisante— ingresó a la atmósfera terrestre a una velocidad cercana a los 48.000 kilómetros por hora. El intenso roce con el aire generó un destello tan luminoso que fue captado desde el espacio por el satélite GOES-19 de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), que normalmente se emplea para detectar relámpagos desde órbita.
«Los meteoros visibles de día son extremadamente raros, porque se necesita un objeto mayor que un balón de playa para producir tanta luminosidad», explicó Robert Lunsford, de la American Meteor Association, en declaraciones al sitio especializado Space.com. «En promedio, ocurre uno al mes en todo el mundo».
El Mapeador Geoespacial de Relámpagos (GLM) a bordo del satélite GOES19 de la NOAA capturó esta imagen del bólido sobre Georgia.
Según Bill Cooke, responsable de la Oficina de Medioambiente de Meteoroides de la NASA, el meteoro fue observado inicialmente a 77 kilómetros de altitud sobre la localidad de Oxford, Georgia. Su trayectoria y el momento del año hacen pensar que formaba parte de la corriente beta diurna de las Táuridas, vinculada al antiguo cometa 2P/Encke. Este enjambre cósmico es célebre porque se le atribuye, entre otros sucesos, la devastadora explosión de Tunguska en 1908, que arrasó 80 millones de árboles en Siberia.
Tras el paso del bólido, comenzaron a circular imágenes en redes sociales que mostraban un agujero en el techo de una vivienda en el condado de Henry, supuestamente causado por un fragmento de la roca espacial.
Here's the hole an apparent meteorite made in one Henry County home, and what landed on floor. We're covering this story live on Channel 2. pic.twitter.com/eBc6GtrvEk
— Brad Nitz (@BradNitzWSB) June 26, 2025
«Al ser un objeto mucho más grande que un meteoro corriente, tiene mayores probabilidades de dejar restos en el suelo», señaló Lunsford. «Cuando recibimos reportes de estruendos o estampidos sónicos, podemos tener más confianza de que se produjeron fragmentos que sobrevivieron hasta la superficie. Por ello, la fotografía del agujero probablemente esté relacionada con este evento».
A fireball, or a bright meteorite, was seen across the southeastern United States on Thursday and later exploded over Georgia, creating booms heard by residents in the area, according to NASA.
The American Meteor Society said it received more than 160 reports of a fireball… pic.twitter.com/c7yBQjAQan
— CBS News (@CBSNews) June 27, 2025
De confirmarse, este meteorito sería un nuevo ejemplo de cómo estas rocas espaciales, originadas en remotas épocas del sistema solar, siguen interactuando con nuestro planeta de maneras sorprendentes, y recordándonos que impactos similares al devastador Tunguska siguen siendo posibles.
¿Te gustó lo que acabas de leer? ¡Compártelo!
Artículos Relacionados