Especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) estudian restos de una mujer, «de fisonomía muy peculiar» de la élite del «Barrio Oaxaqueño» de Teotihuacan, que vivió hace unos 1.600 años.

Según los resultados presentados por el INAH, los restos muestran una deformación craneal que no era típica de la región del Altiplano Central.

Según los resultados presentados por el INAH, los restos muestran una deformación craneal que no era típica de la región del Altiplano Central.

Algunos habitantes de la urbe precolombina se distinguían por su atuendo o su «fisonomía muy peculiar que revelaba su rango y su procedencia», como es el caso de la mujer analizada. Se trata de uno de los personajes que presenta una mayor cantidad de modificaciones corporales entre los registrados hasta ahora en la metrópoli teotihuacana; «fue una persona única, que falleció alrededor de los 35-40 años de edad», informó el antropólogo físico Jorge Archer Velasco.

«La cabeza de esta mujer debió lucir alargada, porque su cráneo muestra una modificación del tipo tabular erecta que se logró mediante una compresión fronto-occipital muy extrema, se trata de un tipo de deformación cultural que no fue propia de esta región del Altiplano Central mexicano donde se localiza Teotihuacan, sino del sur de Mesoamérica», añadió el experto.

El mayor distintivo de «La mujer de Tlailotlacan», como ha sido nombrada por haberse hallado en dicho barrio en 2014, se asoma —literalmente— por el par de redondas incrustaciones de pirita que tiene en sus incisivos superiores, «para ello se tuvo que hacer un taladrado en el esmalte, una técnica que se tiene reportada en la zona maya, en la región del Petén y Belice», mencionó Velasco. Además, los incisivos inferiores fueron reemplazados por una prótesis de serpentinita que, al parecer, es de factura foránea. De acuerdo con los resultados, la dama pudo llevar estas prótesis durante mucho tiempo, porque se han visto signos de desgaste y formación de sarro en dichas piezas dentales.

El descubrimiento del entierro se registró durante las excavaciones que se realizaron en un predio de la colonia El Mirador, en el poblado San Juan Evangelista, en Teotihuacan, donde en tiempos prehispánicos estuvo asentado el Barrio Oaxaqueño también llamado Tlailotlacan, que significa de la «gente de tierras lejanas».

Según los arqueólogos, el funeral de la «La mujer de Tlailotlacan» debió ocurrir entre los años 350-400 de nuestra era.

Sin comentarios
Etiquetas: , , , ,

¿Te gustó lo que acabas de leer? ¡Compártelo!

Facebook Reddit Twitter WhatsApp Pinterest Email

Artículos Relacionados

 0 comentarios
Sin comentarios aún. ¡Sé el primero en dejar uno!
Dejar un comentario