Mystery Planet es un sitio web que ofrece noticias y artículos sobre ciencia y misterios. Para estar al tanto de todo lo que publicamos, además de seguirnos en nuestras redes sociales o suscríbete a nuestro boletín de noticias, te invitamos a nuestro canal de Telegram.
Evidencia de la caída un rayo masivo en el centro de un círculo de piedra oculto en las Islas Hébridas (Escocia), puede ayudar a arrojar luz sobre por qué estos monumentos fueron creados hace miles de años.
El Proyecto de Reconstrucción Virtual de Calanais, una empresa conjunta dirigida por la Universidad de St Andrews y la Universidad de Bradford ha descubierto un posible vínculo entre los antiguos círculos de piedra y las fuerzas de la naturaleza.
Mientras estudiaba Tursachan Chalanais, el círculo de piedra prehistórico principal en Calanais en la Isla de Lewis, el equipo del proyecto sondeó sitios secundarios cercanos para revelar evidencia de círculos perdidos enterrados debajo de la turba.
Un sitio inspeccionado raramente visitado, conocido como Sitio XI o Airigh na Beinne Bige, ahora consiste en una sola piedra en pie en una ladera expuesta con vista al gran círculo.
La geofísica reveló que no solo la piedra era originalmente parte de un círculo de piedras en pie, sino que también había una anomalía magnética masiva en forma de estrella en el centro, ya sea el resultado de un solo gran impacto de rayo o muchos más pequeños en el mismo punto.
El líder del proyecto, el doctor Richard Bates, de la Facultad de Ciencias de la Tierra y del Medio Ambiente de la Universidad de St Andrews, dijo en un comunicado: «Tal evidencia clara de los rayos es extremadamente rara en el Reino Unido y la asociación con este círculo de piedra es poco probable que sea una coincidencia».
«No está claro si el rayo en el Sitio XI impactó en un árbol o una roca que ya no está allí, o el monumento mismo atrajo impactos. Sin embargo, esta evidencia notable sugiere que las fuerzas de la naturaleza podrían haber estado íntimamente relacionadas con la vida cotidiana y las creencias de las primeras comunidades agrícolas en la isla», concluye.
Fuente: Universidad de St. Andrews. Edición: EP.
¿Te gustó lo que acabas de leer? ¡Compártelo!
Artículos Relacionados
0 comentarios