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Una serie de extraños avistamientos ovni tuvieron lugar en la zona antártica a principios de los 1960s. Ahora, se ha encontrado otro documento que evidencia dicha actividad en los cielos del continente blanco.
El investigador, escritor y archivista brasileño Rodrigo Moura Visoni fue quien encontró y digitalizó recientemente el Boletín 62-36 del Programa de Investigación Antártica de los Estados Unidos, dependiente de la Fundación Nacional de Ciencias (NSF).
Allí, en la página 2 y bajo el título de «Hallett, 7 de julio de 1962. Una luz como una pelota de básquet sobre la base», se lee lo siguiente:
Estación Hallett: El 7 de julio a las 11:15 (GMT) varias personas de la estación observaron una luz brillante que atravesó el cielo desde el horizonte sur hasta el norte en 3 o 4 minutos. El objeto tenía la apariencia de tres luces separadas, la más grande dejaba tras de sí una estela de vapor que podía verse claramente en el cielo iluminado por la luna. Cuando el rumbo del objeto era aproximadamente el norte verdadero y se desplazaba no muy por encima del horizonte, surgió un intenso destello de luz que no pareció alterar su curso. Esta fue la segunda luz de este tipo vista este invierno en Hallett, la primera se observó el 7 de junio. Un objeto luminoso similar había sido observado el 18 de marzo por el personal de la base SANAE, en el otro lado del continente con respecto a Hallett.
El investigador Rubén Morales ya se había hecho eco de este caso en su libro Los OVNIs de la Antártida (Ediciones Argentinidad, 2018), citando fuentes especializadas como la revista neozelandesa Antarctic, además de los expedientes desclasificados del famoso Proyecto Libro Azul —dado que la estación antártica Hallett era operada conjuntamente por Nueva Zelanda y Estados Unidos en 1962—.
«Este documento ahora lo ratifica», dijo el escritor. «Cabe reflexionar que el descubrimiento, a más de 60 años de su publicación, de un boletín antártico norteamericano que habla sobre luces extrañas, nos pone en alerta acerca de cuántos otros casos debe haber, cuántos otros informes, en textos que jamás fueron consultados y que siguen acumulando polvo en los estantes de alguna biblioteca».
«La paulatina digitalización de los archivos, más la utilidad de las búsquedas algorítmicas seguramente facilitarán que en el futuro cercano sean encontrados más documentos como el aquí citado boletín NSF 62-36», concluyó Morales.
Fuente: Rubén Morales. Edición: MP.
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1 comentario
19:47
La periodista Linda Moulton Howe contó una vez lo que un militar vio en la Antártida.
Este militar le dijo que el ejército de EE. UU hizo un trabajo secreto en la Antártida. En donde este hombre fue designado. Y él dijo que vio varios vehículos con forma de «discos» que estaban estacionados en la Antártida. Que muchos de los militares veían estas cosas volar por ahí, pero que no le daban importancia, ya que estaban enfocados en la misión que fueron hacer.
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