Está basada en una teoría científica que te va a volar la peluca hasta el multiverso.

Si hay algo que te hace flipar de Rick & Morty es esa pistola de portales que tiene el científico más malhumorado de la televisión. Con ella, el abuelo demente puede moverse con libertad a través del espacio, conocer distintas líneas de tiempo y hasta pasear a su gusto por cualquier rincón del multiverso. En el show nunca se explicó ciertamente cómo es que este aparato funciona.

Siendo una serie que juega tanto con la ciencia, no es sorpresa que sus autores, Justin Roiland y Dan Harmon, se hayan basado en una de las teorías más populares de la física teórica: la TEORÍA DE CUERDAS.

Esta teoría establece la división al mayor límite posible de la materia, y así poder descubrir de qué está hecho el universo. Es decir, dividir la materia hasta encontrar la partícula más chiquita y entender de qué está compuesta.

Hasta ahora, la partícula más pequeña conocida por el humano es el quark. Los protones están hechos de quarks, los átomos tienen protones, todo lo que somos y conocemos está hecho de átomos. Lo que hay dentro de los quarks no está científicamente comprobado, pero esta teoría establece que se trata de filamentos que vibran a distintas frecuencias para darle forma a cada quark, y así moldean el universo a gusto. Como si fuese una cuerda de un instrumento que puede generar distintos sonidos dependiendo de su vibración.

Si existiese una máquina capaz de modificar esas vibraciones con parámetros exactos, se podría manipular cualquier parte del universo, o incluso viajar a través de distintos universos —al tener la posibilidad de maniobrar estas cuerdas, podría existir más de uno—. Eso es lo que probablemente haga el arma de Rick Sánchez. Manejar a su gusto la división más pequeña del todo para modificar cada parte que la rodea.

Edición por: La Cosa Cine.